Estabilidad económica es lo que sí o sí precisamos aún sin ser materialistas ni nada por el estilo porque sin trabajo y sin dinero no hacemos nada, al menos no podemos avanzar. Hace unos meses atrás el mundo pareció venirse abajo cuando el trabajo me dió su "hasta aquí", pérdida y con los sueños destrozados no podía ver luz ni en el sol... pero, no hay mal que dure 100 años y es verdad!, un llamado cambió la suerte, retomar mi actividad laboral y encima reemplazo extra, todo lo que termina implica siempre un nuevo comienzo y todo lo nuevo es mejor aunque en el momento no nos demos cuenta. Dicen que todo llega y el trabajo llegó y no sólo el trabajo sino una meta que parecía perdida: Ser dueña de mi propio negocio no era una utopía... hoy me encuentro haciendo trámites burocráticos para completar la habilitación correspondiente. Todo está ahi y cada vez irá mejor, yo lo sé!
Médicos, estudios, análisis, la medicina es el cuento de nunca acabar y con lo que a mi me encanta, sobre todo las agujas jajajaja. No, las odio con todas mis fuerzas para mí sacarme sangre es como someterme a un proceso de tortura china, llego al punto de entrar en un estado irracional, como ida del mundo, al borde del desmayo. Es necesario, lo sé. Así como encontrar un médico acorde, ah, parece una pavada teniendo en cuenta la guía que indica la gran cantidad de profesionales pero no lo es, y te encontras con de todo jaja, la que te recomiendan y es un desastre, la que te cobra plus cuando no se permite, la tonta que te mira con cara de "estás loca", no, no, así no se puede. Y no son ejemplos al azar, son realidades. Cuando decidí ser madre por intermedio de una iad supe desde un principio que mi aliado en el camino debía ser un médico pero jamás pensé que fuese tan díficil encontrarlo. Me recomendaron una doctora de gran categoría, y sobrada experiencia, claro no me anticiparon que la señora tenía un signo $ en su placa de doctora, primer consulta $30 más la orden, así nomás sin previo aviso porque cuando pedí el turno nadie me dijo del plus extra. Segunda consulta en la que implicaba darme un orden de análisis hormonales y una eco para el conteo de folis, o sea escribir un papelito solicitando dichos estudios, tal simpleza, $40 más la orden y entonces qué me espera, el día de mañana, en un parto o en una césarea, yo prefiero ahorrarme esa plata para otra cosa. Así que desistí de sus servicios. Por nombre elegí a otra doc, una chica joven, pensando encontrar en ella uan buena profesional y superada para mi caso, pero no, una concheta que masticaba chicle y que no fue capaz de disimular su apuro por irse al colgarse la cartera mientras me "atendía" y lo pongo entre comillas porque la tipa sólo se limitó a decirme "Y qué querés que haga yo?", el clásico "Sos joven" y me remató con un "no sé para que viniste?". Saliendo de ahí recordé el nombre y la dirección de otra doctora que había visto en la guía, emepcé a caminar pensando que era cerca, más de 30 cuadras y con zapatos nuevos, llego al lugar. No estaba más, habían puesto un centro de estética. Nooo, si esto es una burla... superada por la situación decidi bajar un cambio, y con las órdenes de todos los estudios pertinentes, porque en el medio visité a mi cardiologo para hacer el control anual, y si, cartón lleno, tengo problemas cardíacos, pero bueh, con todo en la mano, me lanzé a llevar adelante todo el tema estudios y sigo... los turnos me terminaron de enloquecer...
Especialista en fertilidad, otro tema, hablé y consulté con muchos profesionales, conocí de todo, yendo y viniendo intercambié una charla con una doc rosarina que me cayó muy bien, luego hablando con una amiga llegué hasta otra doc, también rosarina, y ahi estaba yo en medio de dos caminos, pedí una señal y fue más que simple, llamé a la pimer doc y había cambiado su horario de atención así que imposible ir, llamé a la segunda y coordiné un turno, ese turno llegó, viaje de por medio, enonctrar el lugar con plano incluido y parando en cada esquina mirando a ambos lados con cara de circunstancia hasta llegar a la clinica y fue excelente, más de lo que esperaba, ella me indicó los pasos a seguir ahora sólo resta empezar a recorrerlos, buen, ya empecé...
Siempre soñé con formar una familia, ser esposa y ser madre, al pasar el tiempo comprendí que ser esposa no me robaba el sueño y que, hasta tal vez nunca lo fuera, ni me interesa... pero no voy a resignar mi sueño de ser madre, toda la vida supe que podía perder todo pero menos mi deseo de ser MAMÁ! Quiero ser mamá por sobre todas las cosas del mundo... y sé que este camino valdrá mil veces la pena.
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